El juicio en curso del Primer Ministro Benjamín Netanyahu por cargos de soborno, fraude y abuso de confianza ha alterado la política nacional en Israel. Esto provocó llamados del presidente estadounidense Donald Trump para que se desestime el caso, lo que generó preocupación por la interferencia estadounidense. Y ha reforzado un sentimiento de larga data entre los de derecha en Israel de que los tribunales, a los que consideran un bastión de la élite liberal, están utilizando la ley con fines políticos y necesitan ser controlados.
Redacción
