En un momento en que los fallecimientos sobrepasan ampliamente a los nacimientos en España y en Europa, y la edad media de la población no deja de crecer, la idea de que la inmigración puede ser la tabla de salvación del sistema de pensiones aparece de forma recurrente en el debate público. Para Óscar Arce. director general de Economía del Banco Central Europeola llegada de extranjeros ayudará, pero no será suficiente, y es necesario un enfoque holístico, en distintos niveles, para garantizar su sostenibilidad. “La inmigración puede alterar algo esta tendencia [al envejecimiento]pero no la va a revertir“, ha dicho durante las XI Jornadas de Pensiones Ibercaja, organizado por CincoDías en colaboración con Ibercaja.
Redacción
