Las fusiones bancarias nacionales no provocan fusiones transfronterizas europeas. La idea de que serían su condición o palanca, aireada a raíz de la opa del BBVA al Sabadell, es contraintuitiva. Parece obvia, pero no lo es. Esa apariencia obedece a que un cierto tamaño es imprescindible en un mercado amplio. Para todo: competir, mejorar la rentabilidad, diversificarse, y para…fusionarse.
Redacción