La incertidumbre comercial y los aranceles están llevando a los fabricantes de baterías de Estados Unidos y a los fabricantes de materiales de batería a expandirse en el extranjero para tener sitios de producción en los centros de demanda más grandes ahora que la energía limpia no es un favorito entre la administración estadounidense. La tendencia se ha hecho evidente en las últimas semanas, en la que dos compañías de baterías estadounidenses se han apoderado de los sitios de producción en Corea del Sur y Europa, apostando a estar cerca de los clientes en los mercados que favorecen la tecnología verde y la expansión de energía renovable. Primero, fue con sede en California …