Las grandes tecnológicas han acelerado la actividad corporativa en las últimas semanas, protagonizando operaciones espectaculares, que han sacudido negocios estratégicos como la inteligencia artificial (IA) y los chips. Estos acuerdos han provocado la creación de unos cruces accionariales, hasta ahora inéditos, incluso entre empresas competidoras, bajo nuevas especulaciones sobre otra burbuja.
Redacción