Es el sueño de cualquier emprendedor. Llegar a un notario, firmar, recibir doce millones de euros, volver a la oficina. Le ocurrió a Pedro Pestana en noviembre, cuando su empresa Marosa, que automatiza las declaraciones de IVA, obtuvo fondos de Aquiline, una firma de capital riesgo estadounidense enfocada en tecnología y servicios financieros. “Fue un proceso muy estresante”, define el emprendedor, plagado de papeleo y auditorías. “Mentalmente la fase del term sheet [el acuerdo que luego se desarrolla] fue muy intensa. Al fin y al cabo es tu empresa, eres consciente de que estás tomando una decisión que no tiene vuelta atrás, hay una negociación que a veces ganas y otras pierdes. La tensión se me notaba, estaba deseando acabar con eso”. Marosa, con sede en Vigo, tenía entonces más de 70 empleados, más de 1.000 clientes y un producto que el mercado aprecia, pero no todas las start-ups llegan a ese punto. Muchas avanzan durante años sin conseguir ingresos, sin un producto o un servicio realmente innovador, queman cientos de miles de euros en capital… y mueren sin haber demostrado gran cosa.
Una legislación avanzada, pero con áreas de mejora
La Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes entró en vigor en 2023 y supuso un paso adelante para fomentar el emprendimiento. Facilita un tipo reducido en el impuesto de sociedades, permite el aplazamiento de deudas tributarias, eleva las deducciones por inversión, y permite exenciones de tributación por las comisiones a éxito que se llevan las gestoras de capital riesgo. “Mejoró el marco normativo, lo cual no quiere decir que no sean necesarios más avances, como una ley de scale ups, que nos permitan hacer crecer las compañías”, señala Paloma Castellano desde Wayra. Carlos Mateo, presidente de la Asociación Española de Startups, cree que ahora es “mucho más fácil incentivar la inversión en estos proyectos”, pero considera que tras dos años de recorrido son necesarias medidas más ambiciosas en materia fiscal “o que por fin se reúna el foro de empresas emergentes” que figura en la norma.