El proyecto Ballena Azul, una empresa de exploración de petróleo y gas en aguas profundas en la cuenca de Ulleung en el Mar del Este (también conocida como Mar de Japón), se ha convertido en la apuesta más audaz pero también más incierta de Corea del Sur en materia de independencia energética. Al ser potencialmente el primer prospecto de hidrocarburos marinos a gran escala del país, se cree que el campo contiene entre 3,5 y 14 mil millones de barriles de petróleo y gas, una ola de oferta que, si se confirma, podría satisfacer hasta 30 años de demanda de gas natural y 4 años de consumo de petróleo. Para un país que importa…