Colombia, un país sudamericano devastado por conflictos, no sólo sufre una nueva ola de violencia sino que también enfrenta una crisis energética. La disminución de la producción de petróleo y gas natural está afectando el suministro interno de energía y afectando la problemática economía de Colombia. Existe una grave amenaza de una grave escasez de gas natural. La falta de perforaciones de exploración, la disminución de las reservas y la caída de la producción están pesando sobre los suministros de gas natural, económicamente cruciales. La escasez de combustibles fósiles se ve agravada por el aumento del consumo y la cada vez mayor utilización del gas natural…
Redacción