El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que termina las sanciones de los Estados Unidos contra Siria, con el objetivo de impulsar la economía en dificultades de la nación y apoyar al nuevo gobierno después de que los rebeldes derrotaron al presidente Bashar al-Assad el año pasado. La orden elimina varias sanciones a Siria a partir del 1 de julio mientras mantiene a los de Assad: «Sus asociados, abusadores de derechos humanos, narcotraficantes, personas vinculadas a actividades de armas químicas, ISIS o sus afiliados y representantes iraníes», según la Casa Blanca. El movimiento de Trump es parte de un esfuerzo para «promover y apoyar el camino del país hacia la estabilidad y la paz», dijo el lunes la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt. «Está comprometido a apoyar una Siria que sea estable, unificada y en paz consigo misma y sus vecinos». (Fuente: Bloomberg)