Una parte creciente de la economía global está cada vez más comprometida con empresas a gran escala, complejas y costosas que involucran desarrollo masivo de infraestructura y avances tecnológicos, también conocidos como megaproyectos. El gasto mundial anual en megaproyectos como sistemas ferroviarios de alta velocidad, aeropuertos internacionales, represas hidroeléctricas, autopistas, centrales eléctricas, granjas eólicas y solares, así como grandes sistemas de TIC públicas para digitalizar impuestos, salud y pensiones se estima entre US $ 6 y US $ 8 trillones, o 8% de GDP global. Desafortunadamente, se ha convertido …