El futuro de los activos del gigante ruso del petróleo y el gas Lukoil sigue envuelto en una niebla. Sin embargo, está claro que el desmantelamiento forzoso del imperio de Lukoil, provocado por las sanciones estadounidenses, podría ser una de las subastas de energía más importantes de la era posterior a la Guerra Fría. Ya no se trata simplemente de una desinversión impulsada por el cumplimiento; ahora se ha convertido en una contienda geopolítica. Esto último no sólo lo hacen las grandes empresas occidentales y las empresas de capital privado, sino también las máquinas de inversión soberanas del Golfo, todas ellas compitiendo por piezas clave…
Redacción
