Golden Goose es un fabricante italiano de zapatillas deportivas de aspecto sucio y desgastado que pueden llegar a costar 2.000 dólares un par. El precio de más de 2.500 millones de euros (2.900 millones de dólares) que su accionista de capital privado acaba de conseguir por la empresa de moda es también un monto más extravagante que desaliñado.
Redacción
