La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha pedido a la Comisión Europea y al Gobierno español suspender el contingente preferencial de aceite de oliva de Túnez después de alertar de que más de 56.000 toneladas entran en la Unión Europea sin sobrecostes y sin los mismos requisitos de trazabilidad, origen y controles que se exigen a los productores comunitarios, y cuyo destino final entienden que resulta opaco para consumidores y está provocando una “distorsión grave” en los precios. COAG denuncia que las importaciones preferenciales desde Túnez no están sujetas a los mismos requisitos de trazabilidad y origen que deben cumplir los agricultores europeos. En concreto, la organización agraria señala que el aceite tunecino entra a gran volumen en el mercado comunitario, pero no se identifica en los lineales ni en los productos finales, lo que indica, aseguran, que podría estar siendo mezclado, reetiquetado sin que el consumidor sea consciente del origen real del producto que compra.
