
El mercado residencial español ha vuelto a tensarse con fuerza en 2025, cogiendo un ritmo en la recta final del año que no se veía desde 2006. Lejos de moderarse, el precio de la vivienda ha acelerado su crecimiento y se ha encarecido un 13,1% interanual en el cuarto trimestre, un avance que, incluso descontado el efecto de la inflación, se sitúa en el 10%, según los datos que ha publicado este lunes la tasadora Tinsa, la mayor del país. Tanto en términos nominales como restado el IPC, es la mayor subida anual en un trimestre desde hace casi 20 años, antes del estallido de la burbuja inmobiliaria.
Redacción
