
Esto se produce cuando Estados Unidos busca asegurar un suministro adicional de CO2, con una demanda en aumento y las fuentes existentes luchando por satisfacer la capacidad.
El recuento de plantas proviene de nuevos datos publicados por el American Biogas Council, que dice que 118 de estas instalaciones reciclan únicamente desechos de alimentos y manejan más de 10 millones de toneladas de desechos no comestibles antes y después del consumo cada año.
El American Biogas Council también contó 124 plantas de aguas residuales en los EE. UU. que combinan desechos de alimentos con sólidos de aguas residuales para generar electricidad, reciclando 1,1 millones de toneladas adicionales de alimentos desperdiciados cada año.
Además, 62 granjas digieren anaeróbicamente desechos de alimentos en combinación con estiércol animal, dando buen uso a otros 1,7 millones de toneladas de restos de comida.
Las plantas de biogás utilizan la digestión anaeróbica para convertir alimentos y materiales orgánicos desechados, como estiércol y sólidos de aguas residuales, en energía utilizable para generar energía, calor o combustible.
Patrick Sergass, director ejecutivo del Consejo Americano de Biogás, dijo que las instalaciones de biogás pueden convertir los restos de comida estadounidenses en suficiente energía local para satisfacer las necesidades de millones.
«Estados Unidos todavía pasa por alto el enorme valor de los restos de procesamiento de alimentos y de los alimentos no comestibles», afirmó. «Esperamos que más municipios y procesadores industriales de alimentos opten por invertir en sistemas de biogás para reciclar sus recursos localmente».
Hablando en gasEn la Cumbre Mundial sobre el CO2 de América del Norte celebrada a principios de este año, Erica Chase, presidenta de la empresa de conversión de gases residuales en CO2 CleanCycle Carbon, describió el biogás (o GNR) como una fuente importante de CO2.
Según datos de RNG Coalition, actualmente hay 474 instalaciones de RNG operativas en América del Norte, lo que representa el potencial para suministrar alrededor de 2,25 millones de toneladas de CO2 al año al mercado.
Se están desarrollando otras 440 instalaciones, que podrían añadir otros 2,1 millones de toneladas de CO2 al año una vez que estén en funcionamiento.
Actualmente, menos del 5 % de las instalaciones cuentan con sistemas cautivos de reutilización de CO2 in situ, lo que destaca un importante margen de crecimiento a medida que el mercado se expande.
